El autismo en el aula – Método TEACCH

La escuela debe ser un reflejo de la realidad social y por tanto, dentro del grupo clase se tiene que tender a la inclusión de todo el alumnado con necesidades educativas especiales y diversidad funcional.
Uno de los retos actuales son los niños con Trastorno de Espectro Autista. Deben ser incluidos en aulas ordinarias siempre que sea posible dado que la segregación a centros especializados, debería ser el último recurso.
Desde su nacimiento, los niños con TEA muestras una serie de características comunes donde la parte de habilidades sociales y comunicación es de las más afectadas. Cuando hablamos de Espectro Autista nos referimos a un abanico, un continuum que va desde leve a grave y con un nivel cognitivo también diverso.
Una de las herramientas que se pueden utilizar en el aula para la inclusión de este alumnado es el método TEACCH. Surgido en California en 1966. Generalmente, la evaluación diagnóstica se produce entre los 2 y los 4 años por lo que el primer paso de inclusión está en la etapa de Educación Infantil.
El objetivo principal del TEACCH es prevenir la institucionalización innecesaria, dando la posibilidad a este colectivo para que pueda desenvolverse de forma lo más autónoma posible dentro y fuera del aula. Este programa está destinado a todas las edades y todos los niveles de desarrollo.
La estructuración y la organización tanto en el aula como en casa, se ha mostrado como la forma que mejor se adapta al TEA.
La enseñanza estructurada dentro de los diferentes programas educativos, debe contar con cuatro componentes:
Las Agendas son otro de los recursos a utilizar. Consiguen que el alumnado, conozca dónde debe estar, qué actividad debe hacer.
Los sistemas tradicionales han mostrado su ineficacia. Las explicaciones verbales pueden ser inútiles para la mayoría del alumnado con TEA por lo que este método da tanta importancia a la presentación visual de la información. Otro aspecto importante que hay que controlar en la estimulación sensorial dado que pueden reaccionar exageradamente a la estimulación ambiental.
Por tanto y para concluir, este método pretende proporcionales actividades funcionales, adaptadas a sus necesidades e intereses.
Aprendizajes significativos para la vida real. Elaboración de material totalmente individualizado, promoverla independencia del alumnado para que sean autónomos en al aula y fuera de la misma.